Soltar no es cortar los lazos sino tomar conciencia de que no podemos controlar al otro.
Soltar no es ser pasivo sino, por el contrario, poder extraer alguna lección acerca de las consecuencias de un acontecimiento.
Soltar es reconocer nuestra impotencia porque admitimos que el resultado final no siempre está en nuestras manos.
Soltar no es desear cambiar al otro, sino dedicar nuestro tiempo a dar lo mejor de nosotros mismos.
Soltar no es cuidar a los otros con total abnegación, sino ocuparnos desinteresadamente de ellos.
Soltar no es "asistir" sino dar coraje.
Soltar no es juzgar, sino darle al otro la posibilidad del error.
Soltar no es ocuparse de todo lo que sucede, sino dejar a los otros dirigir sus propios destinos.
Soltar no es proteger a los otros sino permitirles afrontar la realidad.
Soltar no es rechazar sino aceptar.
Soltar es reconocer nuestra impotencia porque admitimos que el resultado final no siempre está en nuestras manos.
Soltar no es desear cambiar al otro, sino dedicar nuestro tiempo a dar lo mejor de nosotros mismos.
Soltar no es cuidar a los otros con total abnegación, sino ocuparnos desinteresadamente de ellos.
Soltar no es "asistir" sino dar coraje.
Soltar no es juzgar, sino darle al otro la posibilidad del error.
Soltar no es ocuparse de todo lo que sucede, sino dejar a los otros dirigir sus propios destinos.
Soltar no es proteger a los otros sino permitirles afrontar la realidad.
Soltar no es rechazar sino aceptar.
Soltar no es acosar, reprochar, sermonear o retar, sino intentar descubrir nuestras propias debilidades y deshacernos de ellas.
Soltar no es adaptar las cosas a nuestros propios deseos, sino tomar cada día como se presenta y apreciarlo.
Soltar no es criticar ni corregir al otro, sino esforzarnos en convertirnos en lo que soñamos.
Soltar no es añorar el pasado , sino vivir y crecer en el presente con miras al futuro.
Soltar es temer menos y amar más….
Sin duda, conoces a fondo el significado del soltar y el desapego del corazón.
ResponderEliminarHermosas palabras llenas de sabiduría y luz